Crítica de Titanic (Marina Muñoz)

Crítica de Titanic 

Antes de empezar vamos a introducir esta maravillosa película.

 El director es James Cameron.  El reparto: Leonardo DiCaprio, Kate Winslet, Billy Zane, Frances Fisher, Gloria Stuart, Bill Paxton, Suzy Amis, Kathy Bates, Victor Garber y Bernard Hill. El género es drama marino, histórico y catastrófico.  El tema: Amor imposible por la diferencia de clases sociales. Y el argumento: Jack (Leonardo DiCaprio), un joven artista, que gana en una partida de póker, un pasaje para viajar a América en el Titanic, el trasatlántico más grande y seguro jamás construido. A bordo conoce a Rose (Kate Winslet), una joven de una buena familia, que va a contraer un matrimonio de conveniencia con Cal (Billy Zane), un millonario engreído a quien sólo interesa el prestigioso apellido de su prometida. Jack y Rose se enamoran, pero el prometido y la madre de ella se oponen a su relación porque sino, Rose perdería mucha fortuna. Mientras Jack y Rose huyen de Cal, de su mayordomo y de su madre, el gigantesco y lujoso trasatlántico se aproxima hacia un inmenso iceberg y hacia un trágico final…

La primera vez que vi Titanic iba con las expectativas muy bajas, pero realmente me sorprendió muchísimo, por eso Titanic será siempre mi película favorita y he llorado todas y cada una de las veces que la he visto.

Cada elemento de Titanic hace que te enamores cada vez más de ella. Principalmente las interpretaciones de los protagonistas, Jack y Rose ( Leo y Kate). La química entre ambos, ese amor inmortal… es realmente conmovedor. La muerte de Jack en las heladas aguas del Atlántico, creó una historia de amor eterno entre Jack y Rose, y a pesar de ser tres horas de amor puro y duro, no llega a ser empalagoso en ningún momento, incluso en la escenas más sensuales, el director logra sacar ese cariño y delicadeza que envuelve a todo el público.  Y como no te va a atrapar en un nudo de emociones la preciosa canción de Céline Dion, My Heart Will Go On, que utilizan como banda sonora en la película. Esa canción escrita únicamente para la película, que hace que cada vez que la escuches se te salte una lágrima, con esa maravillosa letra conmovedora. 

Todo es precioso hasta el momento del iceberg, uno de los instantes en el que la película se hace más escalofriante, con todos los efectos especiales y con casi una hora de muchísima agua entrando por todas partes del barco. 

Primero el barco se empieza a hundir, hasta llegar a un punto en el que se parte en dos, y después se vuelve a hundir mucho más rápido.  Tras unos segundos después del hundimiento del transatlántico, Jack y Rose llegan a una tabla de madera que estaba flotando, (seguramente ya hayáis oído hablar de esta tabla) donde su amor se hará leyenda. Rose, se sube a la tabla, mientras que Jack se queda en las heladas aguas del Atlántico, congelándose poco a poco. Rose, prácticamente sin fuerza ve una luz de uno de los botes que volvía para ver si quedaba alguien con vida. Llama a Jack para decirle lo que estaba pasando, pero se da cuenta de que estaba completamente congelado y que había muerto de hipotermia. Rose entre llantos, se despide de Jack dándole un beso de la manera más bonita y cariñosa posible y le hunde en señal de amor eterno. Coge un silbato de un salvavidas que había flotando y llama al bote para que la rescatasen.

Al final, Rose, para no volver con su familia y tener que casarse con Cal, se cambia de nombre a Rose Dawson en honor a Jack, tomando  su apellido.

Mucha gente sigue diciendo que los dos cabían en la tabla, (que es verdad, hasta hay estudios en los que han recreado la misma tabla con las mismas medidas y el mismo material en el que demuestra que podrían haber cabido) pero si los dos se hubiesen salvado, Titanic no sería lo mismo, no sería ese conmovedor drama que hace que no puedas parar de llorar, ni tampoco te atraparía de la manera en la que te atrapa el final tan delicado y conmovedor, en el que Jack se despide de la manera más bonita posible, dejándose la vida por amor. Amor que duró solo unas semanas, pero que cambió para siempre sus vidas. 

Por último, tengo que comentar las maravillosas frases que se te quedan en la cabeza y que marcan la película. La primera frase es “Tengo todo lo que necesito aquí conmigo. Tengo aire en mis pulmones y hojas de papel en blanco” que dice Jack, hablando con Rose. Dice esto, ya que él se levanta sin saber lo que le va a pasar a lo largo del día, ni tampoco sabe donde va a acabar. Lo único que lleva encima son hojas para dibujar y un lápiz, y así vive.

La siguiente frase surge en la primera escena en la que se conocen. Lo que ocurre es que Rose se va corriendo del comedor en el que están cenando todos,( la madre, amigos y Cal, su prometido), se va corriendo porque está harta de ellos, y va corriendo a la proa del barco con intenciones suicidas de saltar por la proa del barco, Jack lo ve y sale a ayudarla. Le dice la siguiente frase que quedará marcada por siempre en mi vida: “si tu saltas, yo salto” La frase más bonita de toda la película. Frase que representa el amor con una muestra de valentía y sacrificio. Y eso que todavía no se habían conocido.  Luego cuando el barco se va hundiendo, recuerdan esa frase diciendo “Si tú saltas, yo salto ¿recuerdas?”

Por último, tenemos “ Él me salvó en todos los sentidos en que puede salvarse a una persona. Ni siquiera tengo una foto de él. Ahora solo existe en mi recuerdo” que  dice Rose cuando le está contando la historia a los exploradores en el barco cuando ella ya es una ancianita. Esta frase conmueve hasta al más insensible, aquí tenemos otra muestra más del amor verdadero y eterno.

Y hasta aquí esta maravillosa crítica de una increíble y preciosa película, Titanic.